Nosotros
Desde hace más de 80 años, El Gatito ha estado presente en los momentos más dulces de la vida de
miles de personas. Nuestra historia comienza con Jesús Vázquez Mendoza, cuya visión fue clara: ofrecer un producto con un sabor inconfundible, fabricado con ingredientes naturales, sin conservadores y que represente con orgullo la confitería mexicana.
Hoy, seguimos esa tradición con la misma pasión con la que empezamos, combinando procesos artesanales con técnicas modernas de manufactura. Detrás de cada dulce hay una historia, un recuerdo, un instante que se vuelve especial.
“Poner al alcance de las personas un producto que le dé otro significado a cada momento del día…”
— Juan Vázquez, fundador de Productos El Gatito
¿Qué nos hace diferentes?
En El Gatito creemos que lo artesanal no está peleado con lo moderno. Por eso mezclamos lo mejor de ambos mundos: maquinaria de calidad para asegurar un producto constante y manos expertas que empacan, con cuidado y dedicación, cada pieza.
Tres colaboradoras empacan a mano más de mil dulces al día. Eso no es una fábrica, es una familia.
Usamos ingredientes naturales, sin conservadores, cuidadosamente seleccionados. Nuestro mazapán está hecho con cacahuate, azúcar y manteca vegetal, y cubierto con una capa de delicioso chocolate. Es ese equilibrio entre sencillez, calidad y sabor lo que nos hace únicos.
Hecho en México, con sabor y manos reales.
Nuestro Proceso
Detrás de cada dulce hay una historia de cuidado, experiencia y pasión.
Selección de materia prima
Solo usamos cacahuates de alta calidad
Molido y mezcla
Se combinan con azúcar y manteca vegetal para formar nuestra pasta base.
Formado del mazapán
Se moldea con maquinaria especializada para lograr su forma exacta.
Cobertura
Una capa de chocolate envuelve cada pieza como un abrazo.
Reposo y corte
Se deja enfriar para luego cortarse con precisión.
Empaque artesanal
A mano, con cariño, como se hacía antes… y como nos gusta hacerlo ahora.
Galería









